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La sequedad en la boca es un problema más grave de lo que parece. Como ya comentamos en su día, esta afectación, además de predisponer el mal aliento, también puede dificultar el habla, la masticación y la deglución. Son mucha las personas que la sufren, es por eso que a día de hoy ha surgido la necesidad de llevar a cabo nuevos procedimientos para combatirla.
Así pues, la xerestomía, es decir, la sequedad en la boca, se produce cuando las glándulas salivales no generan suficiente saliva como para mantener la boca húmeda. Es por ello que la actividad de masticar o hablar se dificulta. De esta manera, tener la boca pegajosa, la saliva viscosa, dolor o sensación de ardor en la boca o en la lengua, o agrietamiento en los labios, pueden ser algunos de sus principales síntomas.
Hay que tener en cuenta que la saliva ayuda a mantener el equilibrio saludable de las bacterias en la boca. Cuando ésta es escasa, las bacterias y otros organismos se desarrollan con más rapidez y pueden provocar llagas e infecciones bucales. Entre las causas que pueden provocar la xerestomía, encontramos el consumo de antidepresivos, algunos analgésicos, infección bucal o deshidratación.

Si sufres alguno de estos síntomas, contáctanos.